Tameshigiri es la prueba que se realiza para asegurarse de la calidad de una katana. En el Japón feudal se contrataba a espadachines expertos para realizar dichas pruebas y asegurarse que la habilidad no fuera un factor de falla. Durante el período Edo era una práctica común entre los Samurái, usar los cuerpos de criminales ejecutados para probar una Katana. Esta práctica era conocida como Suemonogiri o «corte de objetos atados». Para esta práctica se amarraba el cadáver en posiciones que permitían hacer cortes a través de la máxima cantidad de hueso posible para comprobar la calidad de la hoja.
Si el corte era mal ejecutado o la hoja no era de buena de calidad la espada podía dañarse severamente. Al profesional encargado de realizar esta prueba era llamado Otameshi-geisha, también se contrataban a Samurái para realizar esta prueba, estos eran conocidos como Suemono-shi. Si la prueba era exitosa, se grababa en la espada el nombre del que realizo el Suemonogiri, la cantidad de cadáveres que cortó, el lugar donde se realizó la prueba y ocasionalmente alguna observación. Estás anotaciones estaban en el nakago (la parte de la hoja que está oculta en la empuñadura) y servían como referencia para dar testimonio a las futuras generaciones acerca de la calidad de la espada.
Las más extremas formas de tameshigiri se popularizaron durante el final de la era Tokugawa, un período conocido como Bakumatsu, donde se realizaban pruebas destructivas a la katana para probar la superioridad de las espadas tradicionales japonesas en comparación a las armas que eran introducidas por los extranjeros. Esta práctica era conocida como aratameshi y se cortaban toda clase de materiales resistentes, bambú grueso, cuernos de venado, tablas de madera dura, árboles e incluso se impactaba la hoja contra piedras, todo esto para ver cual era el límite del arma antes de quedar inservible y determinar la calidad de la obra de un herrero. Otra prueba común se conocía como kabuto wari (kabuto es el casco que usaban los Samurái en combate) donde se intentaba partir un kabuto usualmente relleno de trapos mojados, limadura de hierro o costales de arena tratando de simular una cabeza humana.
En la actualidad la práctica más común de tameshigiri es usando tapetes de cuerda de arroz (wara) enrollados conocidos como tatami omote, en algunos casos se enrollan alrededor de tallos de bambú y se remojan en agua simple algunas horas antes de empezar la práctica, la intención es que simule en la medida de lo posible la sensación de cortar una extremidad. También el objetivo de la prueba se ha modificado pues ya no se trata de medir la calidad de la espada sino de probar la habilidad del espadachín.